Con tanta lluvia, el río estaba precioso, rebosante, y con el calor, cada una de las pozas repleta de gente, como antiguamente, bañándose en sus aguas. Tanto tiempo hablando de hacer una ruta de senderismo entre amigas, y elegimos como destino el tramo de El Bosque a Benamahoma. Un magnífico día en buena compañía.
Recuerdo que siempre imaginaba lo que veía como si fuera una fotografía, pero cuando realmente la hacía, ésta no devolvía la imagen que yo tenía en mi mente, sino simplemente una imagen. Ahora tengo la oportunidad de poder transmitir lo que realmente veo gracias a Fran Medina, quien ha sabido transmitirme parte de sus conocimientos, y a mi gran amigo Julián, con el que día a día voy educando mi forma de ver y hacer ver a los demás lo que me rodea.